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Porque no somos nada, pero menos es una cama, y menos es una cama comprada en el Ikea con sujeciones de conglomerado, pero lo que verdaderamente no es nada: tan sólo tablas, tuercas, astillas, basura, es una cama comprada en el Ikea con sujeciones de conglomerado dirigiéndose a casa de K. donde P. y V. esperan ansiosos montarla y probarla. martes, febrero 19, 2008
Ascenso y caída de una cama
Publicado por Alberto en 6:31 p. m.
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